Esta bolsa deslizante para quirófano está especialmente diseñada para entornos médicos de precisión, optimizada mediante ingeniería médica de precisión para lograr la combinación perfecta de transferencia segura y portabilidad ligera. El producto pesa solo 250 g, un 60 % menos que las herramientas de transferencia tradicionales, lo que permite al personal médico controlarla con una sola mano. Su material antiestático especial cumple con el estándar de limpieza de clase 100 000 para quirófanos, con una tasa de descarga estática del 99,7 %, eliminando el riesgo de electricidad estática en el entorno quirúrgico. Gracias a su tecnología de despliegue rápido, la instalación se completa en 3 segundos, adaptándose a las emergencias del quirófano. Soporta el peso estándar del paciente anestesiado y es compatible con diversos equipos de monitorización, sin interferir con la monitorización intraoperatoria, completando de forma segura entre 25 y 30 transferencias diarias de pacientes quirúrgicos, lo que la convierte en una herramienta esencial para los quirófanos modernos.